La tortilla me miraba juguetona
pero yo tenía unas ostras exquisitas
de primera clase…
y ese bocata de tortilla
aceitosa empapando
el pan del niño pobre…
-¡Mamá de mayor quiero
ser un niño pobre!-
Exclamé.
Por eso, preciosa, créeme, soy un adulto,
aunque parezca un niño,
es sólo que cuando viajas,
los sueños parecen cumplirse.
-calla, mentiroso, eres un crio pobre.-
Entonces me reí por dentro,
¡ Ella ignoraba que los ricos,
consiguen cuanto quieren!
14 de mayo de 2011, 12:26
Jaja... Y bueno, ¿Al final te comistes la tortilla?
Fran
17 de mayo de 2011, 13:33
Estoy con Fran, ¿qué pasó con la tortilla?
Adr.
18 de mayo de 2011, 13:22
Ja ja, sí, pues ¡qué fallo! Me quedo sin la tortilla....
19 de mayo de 2011, 10:50
Muy complicado de entender, no se que decirte.
Caridad.
20 de mayo de 2011, 6:37
La cosa es que lo que está dando que hablar es si al final se comió o no la tortilla... interesante lo que realmente interesa...
XD